domingo, 26 de febrero de 2012

Un retraso en la maduración de algunas regiones del cerebro puede ser el origen del TDAH

LONDRES.- Técnicas de neuroimagen demuestran que los niños con trastorno por déficit de atención, con o sin hiperactividad (TDAH) presentan un retraso en la maduración de algunas regiones del cerebro, zonas relacionadas con la atención y el autocontrol, que podrían ser el origen de este y otros trastornos psiquiátricos, según ha explicado la doctora Katya Rubiá, profesora en Neurociencias Cognitivas en el Instituto de Psiquiatría de Londres.

   Las investigaciones llevadas a cabo por su grupo investigador lo demuestran, explica. "Nadie sabe por qué se produce el TDAH, lo que sí se ha demostrado a través de técnicas de imagen es que hay zonas más afectadas que otras, concretamente en las conexiones entre el lóbulo frontal y los ganglios basales, estas regiones (redesfrontosguiadas), son importante para la atención, el autocontrol, la atención y la motivación", afirma.
   Se considera que el TDAH no tiene una causa única, sino que se da por una serie de factores biológicos y psicosociales que interactúan entre sí. Por un lado, una producción irregular en dos neurotransmisores como son dopamina y noradrenalina; y, por el otro, la predisposición genética, que se traduce en un riesgo del 57 por ciento de que el niño presente este trastorno si uno de los dos padres también lo tiene.
   En este sentido, investigaciones acerca del origen del TDAH realizadas en las dos últimas décadas han hecho grandes progresos en la comprensión de las funciones del córtex prefrontal, en su implicación en los procesos de inhibición y autocontrol a través de las llamadas funciones ejecutivas y, por tanto, en su implicación en los procesos neuropsicológicos alterados subyacentes al TDAH.
   Esta experta utiliza la neuropsicología, la genética, la manipulación farmacológica y la resonancia magnética para investigar los sustratos neuronales de las funciones cognitivas asociadas con la atención y la impulsividad en el desarrollo normal y en especial en trastornos infantiles como el TDAH y otros trastornos conductuales.
   Dado que los síntomas que sufre el niño con TDAH van más allá de los síntomas nucleares del trastorno (hiperactividad, falta de atención o de impulsividad), en la actualidad se establece que el tratamiento correcto del TDAH pasa por su abordaje multimodal. Esto supone la realización simultánea y coordinada de aproximaciones terapéuticas farmacológica, psicológica, psicopedagógica y psicosocial.
   El fármaco más utilizado es un psicoestimulante, el metilfenidato, que aumenta los niveles de dopamina. Aunque, en los últimos años se están estudiando nuevos bioquímicos. No obstante, recuerda, "los fármacos no curan, disminuyen los problemas conductuales", hasta el punto de que "en el 70 por ciento de los pacientes los fármacos disminuyen los problemas conductuales hasta un 40 por ciento". Sin embargo, no los normalizan del todo y, al menos, "hay un 30 por ciento de niños que no responden a ninguna medicación", para estos caso se aplican sobre todo los tratamientos conductuales.
   Este trastorno se caracteriza por la hiperactividad, falta de atención e impulsividad, pero va más allá ya que afecta a todas las áreas de la vida del paciente relacionadas con el desarrollo social y emocional. En la vida cotidiana, estos niños son incapaces de permanecer quietos y concentrados en una actividad, no atienden y tienen un mal comportamiento.
   "Tienen grandes problemas con la atención sostenida, para concentrarse, se distraen con mucha facilidad y les cuesta atender a una cosa; tiene una falta de inhibición y problemas con la memoria a corto plazo; son impulsivos y no consideran las consecuencias de sus actos", explica.
   Asimismo, presentan un retraso psicomotor, trastorno del lenguaje y dificultades en la grafía, que muchas veces se confunde con falta de interés o incapacidad del niño para aprender. A todo ello se le debe añadir su mala gestión de las emociones, que les lleva a tener problemas con sus compañeros y a que a menudo se les etiquete como 'los malos de la clase'. De hecho, señala Rubiá, "se ha observado que hasta un 50 por ciento de los presos han sufrido TDAH en la infancia".
   Infradiagnóstico es alto, "en gran medida por el desconocimiento de los médicos de Atención Primara", explica, sin embargo es indispensable abordar cuanto antes su tratamiento porque es una enfermedad crónica.
   Afecta entre el 3 y el 7 por ciento de la población infantil en España, según la Guía de Práctica Clínica en TDAH, del Ministerio de Sanidad. Se estima que más del 80 por ciento de los niños que presentan el trastorno continuarán padeciéndolo en la adolescencia, y cerca del 65 por ciento lo presentarán también en la edad adulta, aunque las manifestaciones del trastorno irán variando notablemente a lo largo de su vida.
   Actualmente, esta experta está estudiando el uso de 'neurofeedback' en estos pacientes y ha observado que se han producido avances en este área, ya que "tanto en niños como adultos se ha comprobado que son capaces de activar las funciones deterioradas". Según explica se trabaja directamente con el paciente enseñándole a autorregular las regiones que no tiene completamente activadas.
   No obstante, el tratamiento pasa por una atención multidisciplinar, apoyada por psiquiatras especialistas en niños y centros de atención donde se les ayude a modular el comportamiento, a través de fármacos y actividades conductuales. Además, ha añadido, es necesario aumentar la información y formación sobre este tema entre profesionales y la población general.

sábado, 25 de febrero de 2012

Las profesoras evalúan peor a sus alumnos masculinos

LONDRES.- Llevamos años constatando que las chicas obtienen - por lo general - mejores resultados académicos en el instituto que sus compañeros de sexo masculino. Seguramente algunos chicos se defiendan diciendo aquello de "la profesora me tiene manía, es más dura con nosotros que con ellas". ¿Puede ser cierto?

Un estudio reciente realizado en las aulas de 29 colegios de Gran Bretaña, donde participaron 1200 alumnos, confirma las sospechas de algunos. Cuando a los alumnos masculinos se les decía que sus exámenes iban a ser evaluados por mujeres profesoras, bajaban la vista porque pensaban que sus resultados serían peores. Y lo cierto es que sus sospechas resultaron correctas.
Las maestras puntuaron - de media - de forma más baja a los chicos, en comparación con examinadores externos no identificados.
En cambio, los profesores de sexo masculino, premiaron a los chicos con mejores notas en comparación con esos mismos examinadores externos no identificados.
Los hallazgos de este estudio, publicados por el Centro de Desempeño Económico dependiente de la Facultad de Económicas de Londres, podría tener grandes repercusiones a la hora de que los alumnos escojan profesor, ya que parece que aunque leve, el sesgo sexista realmente existe.
El profesor Alan Smithers, investigador de prestigio en este campo académico, cree que los hallazgos son fascinantes.
El estudio mostró también que las chicas se esfuerzan más cuando su profesor es un hombre, ya que creen que así obtendrán mejores notas. Sin embargo, sus sospechas no se corresponden con la realidad, ya que los profesores masculinos tendieron a darles exactamente las mismas notas que los examinadores externos.
El estudio mostró que los chicos creían que obtendrían una nota un 3% inferior si se lo corregía una mujer. Las chicas creían que sus resultados serían un 6% más altos si les evaluaba un hombre.
Para el profesor Smithers, estos resultados muestran lo importante que resulta encargar a examinadores independientes que evalúen las pruebas académicas de los alumnos.

lunes, 20 de febrero de 2012

El filósofo y pedagogo Marina advierte sobre el peligro de infrautilizar la memoria con las nuevas tecnologías

BARCELONA.-   El pedagogo y filósofo José Antonio Marina ha advertido del peligro que supone dejar de utilizar la memoria en el aprendizaje, teniendo en cuenta que gran parte de la información se encuentra disponible en Internet con un acceso fácil a través de las nuevas tecnologías.

   En la conferencia 'La educación del talento: el papel de la escuela y el de las familias' de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y la Fundación Jaume Bofill, Marina ha alabado la "posibilidad enorme" de las nuevas tecnologías.
   No obstante, también ha alertado de las consecuencias de la creencia que se está generalizando sobre que no es necesario aprender ni memorizar nada porque todo lo puede ofrecer la tecnología.
   "En realidad lo que nos interesa es que la gente que se conecte a Internet y sepa mucho", ha asegurado en la conferencia en la que ha comparado el celebro de un adolescente con un coche muy potente en manos de una persona sin permiso de conducir.
   Según ha observado, durante la adolescencia el cerebro se rediseña y esto se produce en una etapa de aprendizaje importante.
   Para concluir, Marina ha señalado que el talento que se debe enseñar ha de ser activo --ya no sirve huir del problema--, emprendedor, con capacidad de crear, evaluar y perseverante, para afrontar el fracaso y aprender de los errores.

jueves, 16 de febrero de 2012

La rabieta "es evolutivamente necesaria" en el niño

La psicóloga infanto-juvenil Rocío Ramos-Paúl ha asegurado en Zaragoza que la rabieta infantil "es evolutivamente necesaria porque el niño no sabe contar qué le ocurre" y los padres tienen que enseñarle "a identificar su emoción" e indicarle "lo que hay que hacer".

   La especialista ha explicado que "educar es un trabajo muy largo", que requiere de "mucha constancia" y "flexibilidad" porque "cada momento del niño y cada niño son distintos" y "cada situación por la que pasa la familia es distinta y necesitamos enfrentar de manera distinta cada una de estas variables".
   Rocío Ramos-Paúl, conocida por su programa televisivo 'Supernanny', ha impartido la ponencia 'Dificultades en la educación de los hijos', en Ibercaja Patio de la Infanta, dentro del ciclo 'Educar para el futuro' de la entidad de ahorro.
   La psicóloga ha comentado que las rabietas "muchas veces tienen que ver con que el niño no sabe expresarse emocionalmente y con el inicio de la identificación y control de las emociones para ser luego inteligentes emocionalmente".
   Así, hay investigaciones que dicen que las rabietas se producen cuando el niño está cansando y cuando tiene hambre por lo que "hay una o dos todos los días" y, además, "está la del 'te he dicho que no'".
   En ellas, los padres deben enseñar al niño a identificar su emoción, controlarse y saber cómo canalizarla y actuar, ha dicho, para reconocer que para educar es preciso "cultivar la paciencia" y, en el caso de las rabietas "muchas veces son muy desesperantes" y si, por ejemplo, tienes dos hijos "son seis rabietas diarias y acabas con la cabeza como un bombo".
   La especialista ha señalado que el ejemplo de los padres "es fundamental" porque "uno de los mejores aprendizajes para los niños es la imitación, para lo bueno y para lo malo" y en la etapa de cero a seis años lo niños "imitan todo de los padres porque no tiene otros puntos de referencia".
   También ha reconocido que para los padres "es difícil decir que no, pero si no decimos que no con determinada edad, el niño no es capaz de aprender que hay cosas que son adecuadas y comportamientos inadecuados".
   Así, "si no ponemos limites, muchas veces siguen pidiendo, exigiendo y pensando que tiene que estar todo a su disposición en el momento que ellos decidan y si eso no ocurre la reacción es agresiva o ansiosa".
   A su entender, hay que saber decir que no desde el primer día, si bien cada etapa es distinta y "a un recién nacido no puedes decirle 'esto no', pero sí generar unos hábitos respecto al sueño, la alimentación, diferenciar la noche del día", de forma que "le vas organizando la cabeza, eso le genera orden y le da seguridad".
   Saber decir que no "es más claro" cuando tienen que aprender a comer alimentos sólidos o a comer solos y vestirse, "pero todo lo que hayamos hecho antes tiene sus frutos porque el niño entiende mejor el no e integra mejor sus hábitos".
   Para Rocío Ramos-Paúl, el objetivo de los padres es que sus hijos sean felices, algo que, en su opinión, supone "que tengan hábitos, límites y que se sientan queridos y valorados por sus padres", para señalar que "nunca hemos tenido tanta información" sobre la educación de los hijos porque "estamos en un momento donde preocupa mucho" esta cuestión.
   A este respecto, ha considerado que "estamos intentando volver a un punto medio" entre la laxitud y el autoritarismo, al tiempo que el hecho de que se tengan menos hijos hace centrar más la atención en ellos y "la investigación apoya todo esto", ya que ha demostrado que entre los cero y seis años "el cerebro tiene una capacidad de aprender que no sabíamos" y que ha contribuido a que ahora "los niños sean más espabilados e inteligentes" porque "tienen muchos estímulos que antes no tenían".
   La especialista ha repasado las principales dificultades en la educación según la edad. Así, entre los cero y tres años ha mencionado la comida y el sueño, entre los dos y los tres, las rabietas, las normas, los límites y el no, mientras que en la etapa de los siete y ocho también es complicada para normas y límites y a partir de esa edad los padres tienen que favorecer el hábito de estudio, para después llegar ya a la adolescencia.
   La psicólogo ha sostenido que detrás de una conducta inadecuada o un comportamiento que se quiere quitar "hay que saber leer qué hay detrás" y que puede ser que "no se hayan puesto bien los limites al niño, no se haya premiado lo que quiero que se repita o no castigado lo que quiero que deje de aparecer".
   También pueden deberse a otras circunstancias, como un cambio de casa o los celos por la llegada de nuevos hermanos. "Las diferentes situaciones vitales por las que pasa el niño hace que se dispare más el comportamiento inadecuado", que también puede responder a que "saca de él una ventaja".
   Para abordarlas, es preciso analizar la situación del niño y de la familia. Asimismo, ha indicado que hay que "reforzar conductas" y decirle a los niños lo que hacen bien "porque lo repiten", especialmente hasta los ocho años, y señalarles lo que tienen que cambiar.
   Por otra parte, ha sostenido que los padres no pueden tener miedo a las reacciones de los hijos. Cuando esto ocurre, ha apuntado, "utilizo el humor" para pedir a los padres que imaginen las situaciones de conflicto como una tercera persona que está mirando "y les pregunto si no les haría gracia la sensación de miedo y dominio de un ser chiquitito, que es capaz de organizar la comida o distribuir donde duerme cada cual".
   Ha agregado que los padres "se suelen reír bastante y quitamos angustia". Respecto a la pérdida de paciencia de los padres, ha expuesto que "el problema es si no la tienes nunca", mientras que "pegar un grito es normal" y "lo que hay que hacer es reconocerlo y reconocerlo al hijo, que estará encantando de escucharlo y aprenderá que cuando uno se enfada, a veces pega un grito" y si bien "no es la reacción que hay que tener normalmente y aprenderá a pedir perdón, que es una habilidad fundamental".
   La especialista también ha defendido la necesidad de que los padres dediquen tiempo a sus hijos diariamente, en donde les atiendan y ellos sean los protagonistas, tiempo "que no tiene que ser solo de juego", sino que también puede ser para enseñarles a controlar una rabieta o, por ejemplo, a atarse los cordones de los zapatos, es decir, estar con ellos y ayudarles a resolver sus problemas.
   "Cada uno tiene que revisar su agenda y ser conscientes de que hay que tener un tiempo diario" para los hijos y si esto es difícil "darle calidad al tiempo" que se pasa con ellos.
   Por otra parte, ha recalcado que "todos los agentes que tienen relación con el niño ejercen influencia en su educación", y si bien "el peso de los padres es importante, también del colegio y de todos los que estamos en relación con el niño", igual que la televisión y las nuevas tecnologías.
   Rocío Ramos-Paúl ha defendido que a estas últimas, que "no hay que demonizar", sino enseñar a los niños a tener "autocontrol", para lo que es importante que las pantallas y el ordenador "estén en zonas comunes para todos" y dar un tiempo determinado de uso, además de que son medios "fantásticos" como premios para fomentar las conductas positivas y "también sirven para que los niños aprendan cosas".
   La especialista ha asegurado que todos los niños pueden cambiar porque "todo ser humano tiene capacidad de cambiar y el niño más" porque "está preparado para hacer cambios mucho más rápidos" y ha subrayado que el sentido del humor "es una de las grandes habilidades para educar", además de opinar que "a veces queremos que todos los niños sean perfecto, pero es más bonito que cada uno sea distinto".

El "campeón de la memoria" dice que "la manera de enseñar en los colegios es estúpida"

MADRID.- "La manera de enseñar en los colegios es estúpida". Así de claro lo tiene Joshua Foer, el periodista de 29 años con un coeficiente normal que, tras entrenarse durante un año, se convirtió en la memoria más privilegiada de los Estados Unidos.

Foer cuenta esta historia tan real como increíble en "Los desafíos de la memoria", el libro editado por Seix Barral que se ha convertido en la revelación del año en Estados Unidos e Inglaterra: ha permanecido meses en la lista de más vendidos de The New York Times, Amazon lo ha seleccionado entre los mejores de 2011 y está ya en vías de publicación en más de treinta países.
Con aspecto aniñado, sencillo e informal, este joven ha confesado en una entrevista de agencia que no encuentra motivos de presunción en algunas de sus hazañas, tales como recordar cantidades ingentes de números o barajas de cartas, así como el orden en que se colocan, o memorizar cien caras con sus nombres e incluso con sus datos biográficos en apenas unos minutos.
"Yo no tenía una memoria excepcional entonces ni ahora, simplemente me he entrenado para usarla en ciertos aspectos relacionados con el concurso anual de Estados Unidos", un certamen que ganó aplicando los trucos nemotécnicos existentes más utilizados y donde fue capaz de vencer a gente que, por ejemplo, puede memorizar más de 1.500 números aleatorios en una hora.
Todo comenzó cuando este periodista, especializado en asuntos científicos, entrevistó a los "campeones de la memoria" y se dio cuenta de que todos habían aprendido sus habilidades a través de reglas nemotécnicas ya conocidas, algunas de las cuales se remontan al año 82 a.C.
En ellas, la clave básica para recordar es la asociación de ideas, el contextualizarlas y, por ello, "no se entiende que en los colegios se enseñen las materias en compartimentos, de forma separada y en bloque", ha apuntado.
"Aprendemos algo, nos examinan y nunca volvemos sobre ello, como si fueran realidades separadas, con la consecuencia de que lo olvidamos todo con el paso del tiempo", ha comentado.
Foer ha opinado que se podría hacer "mucho por la enseñanza" trasmitiendo a los chavales las reglas nemotécnicas básicas pero también "volviendo una y otra vez sobre los temas, dejándolos y retomándolos hasta que la sabiduría que se aprende esté entrelazada con ideas que formen un todo".
Este joven se dio cuenta, tras conocer a los "supermemorias", de que el secreto para recordar una información es separarla en pedazos y vincularla con algo interesante, original, relevante, colorido, extraño, sexual o atrayente, tanto que impida olvidarlo y, después, convertirlo en una "imagen vívida que se pueda visualizar en la mente".
El autor usa su propio nombre para explicarlo. "Por ejemplo, yo me llamo Joshua Foer. Para recordarlo puedes pensar que la pronunciación de mi apellido suena como el número cuatro en inglés "four" e imaginarte que coges un spray y me pintas ese número en el cuerpo; probablemente siempre que me veas recordarás cómo me llamo".
Así, lo mejor para no olvidar es relacionar las cosas con algo que uno se imagine y "cuanto más loco o extraño sea, mejor se recordará su imagen visual y, en consecuencia, el concepto o el número que queremos memorizar", ha señalado.
Y es que la memoria es "como una máquina que no sabemos utilizar" pero que "tiene sus reglas y son sencillas". "Es gracioso, no sé por qué no nos enseñan eso...", se ha preguntado el autor.
Ha relatado que había hablado con científicos que "se dan golpes contra la pared" ante esta cuestión, porque los métodos con los que la mente almacena la información son "claros" y "se podrían impartir en el colegio".
Foer ha considerado que hay "muchas evidencias" de que la mejor manera de aprender algo es "cogerlo, dejarlo y volver sobre ello, con intervalos de espacios que nos permitan irlo relacionado".
"El método actual de enseñanza es contradictorio con este principio, es una manera estúpida de enseñar, sabemos que es contrario a cómo funciona nuestra memoria", ha concluido.

martes, 14 de febrero de 2012

El ministro Wert apuesta por vincular más las becas al rendimiento del alumno español

MADRID.- El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha señalado este martes su intención de revisar el sistema de acceso y mantenimiento de las becas universitarias porque, a su juicio, actualmente están vinculadas al nivel de renta familiar y no al rendimiento académico del becado.

   "Las becas se han convertido en una asignación no competitiva, es decir, que a partir de una determinado nivel económico se tiene el derecho a una. Es el nivel socioeconómico el que determina la beca y prácticamente no hay condicionamiento en el otorgamiento y la continuidad de la misma respecto al rendimiento", ha afirmado el ministro durante el desayuno informativo organizado por el Foro Nueva Sociedad.
   Según ha advertido, en la "mayoría" de las carreras universitarias, el becado tiene que aprobar el 80 por ciento de los créditos de un curso para mantener la beca, y en el caso de los alumnos de ingenierías, "basta con que obtengan el 60 por ciento" de los créditos. También ha señalado que para acceder desde Secundaria a una beca universitaria, "basta con que su calificación media en secundaria sea de cinco puntos".
   "No sólo hay que revisar el mecanismo de acceso a la beca, sino también el mecanismo de mantenimiento de la misma en dos sentidos: tiene que ser más exigente en cuanto al rendimiento y más sensible a la exigencia", ha aseverado, para añadir que para continuar con una beca, al alumno "le da exactamente igual obtener un sobresaliente que un cinco".
   Si bien ha indicado que no quiere "prejuzgar" este asunto, también ha avanzado que es un tema que está "en estudio" y requiere una "reflexión profunda". No obstante, ha aclarado que su departamento no va a reducir "en absoluto" los recursos destinados a las becas.
   Wert ha dicho también que cuando se habla de becas en la universidad, "a veces, se olvida de la beca más importante, que es la que tienen garantizada todos los alumnos del sistema universitario, a los que les cobran el 5 por ciento de lo que cuesta su puesto".
   Sobre la participación del tejido empresarial en el sistema universitario, el titular de Educación ha indicado que con la aprobación de la Ley de Mecenazgo su ministerio tiene como objetivo crear un marco a partir del cual las compañías se interesen por la universidad, "no sólo desde el punto de vista de su responsabilidad social corporativa, sino también empresarial".
   "Hay que dar un paso más y conseguir que el tejido empresarial se acerque a la universidad y se acerque a la gestión de la misma", ha aseverado el ministro, que ha añadido que en las mejores universidades del mundo la iniciativa social "es un elemento central".
   A su juicio, lo que se haga en este sentido, a través de la Ley de Mecenazgo, "va a contribuir a superar esta situación, que es anómala, pues no hay ninguna universidad española entre las 150 mejores", según ha apostillado.

domingo, 5 de febrero de 2012

Cómo convertir a un niño en un genio

MADRID.- Todos los niños tienen dentro de sí el potencial necesario para convertirse en un genio. Sólo hace falta motivarlos de la manera adecuada para que lo desarrollen. Ésta es la tesis defendida por el experto en educación Fernando Alberca, autor del libro 'Todos los niños pueden ser Einstein' que se ha situado en los últimos meses entre los más vendidos del país.

Alberca asegura en una entrevista a ELMUNDO.es que el título de su libro "no obedece a ninguna estrategia de márketing", sino que está plenamente convencido de que es posible que un niño se convierta en un genio si se le sabe motivar. Él, cuenta, tiene ocho hijos con edades comprendidas entre los cuatro y los 18 años y la mayor es capaz de leer 296 páginas por hora, es decir, lee un libro de tamaño medio en el mismo tiempo que cualquiera dedica, por ejemplo, a ver el capítulo de una serie en televisión.
"Entre mis hijos no hay ningún súper dotado", puntualiza Alberca, quien aclara que, en el caso de su hija, sí que ha estado estimulada para que sea capaz de alcanzar esa velocidad de lectura. De hecho, está convencido de que hay una causa detrás de cada fracaso escolar, de modo que si a ese niño que saca malas notas se le motiva de la manera adecuada "pasa de un fracaso enorme a sobresaliente". 
Alberca se refiere a la vida de Albert Einstein para probar que su tesis es cierta. Cuenta que este científico no aprendió a leer hasta los siete años, su madre pensaba que era retrasado mental y su maestra lo calificó como "mortalmente lerdo". Hasta los 15 años, cuando un profesor le pidió su opinión en clase, "no encontró a las personas adecuadas para estimular su inteligencia, su motivación". La genialidad de Einstein, cuenta Alberca, reside en que fue capaz de usar el hemisferio derecho, el más creativo e intuitivo, para resolver problemas propios del hemisferio izquierdo, el más ordenado, el más racional, el más matemático.
"Cuando en un partido de fútbol Messi se adelanta a los otros jugadores nos parece muy brillante, nos parece genial y es porque ha ido un paso por delante al usar el hemisferio derecho". Por este motivo, este profesor señala como fundamental que un niño desarrolle los dos hemisferios cerebrales para desarrollar todo su potencial.
Si embargo, la enseñanza tradicional está diseñada "para desarrollar más el hemisferio izquierdo". "Todas las asignaturas se dividen en trimestres, en lecciones... Lo ordenado", enumera Alberca, para quien también es necesario motivar al hemisferio derecho, "más generalizador y que permite desarrollar la intuición".

Los dos hemisferios

La clave para que un niño desarrolle todo su potencial está, según Alberca, en ver cuáles son las partes del cerebro en las que se apoya menos y potenciarlas. "Los seres humanos son pianos con todas las teclas. Incluso por enfermedad puede faltar alguna tecla, pero siempre se puede sacar la melodía. Eso sí, depende del intérprete el que salga una melodía u otra", explica Alberca quien esta semana ha intervenido en el ciclo 'Encuentros de ciencia y pensamiento' organizado por la Diputación de Málaga.
De este modo, si en un niño predomina el uso del hemisferio izquierdo, el más racional, "no podemos explicarle algo" de forma que use sólo ese hemisferio, sino que hay que incentivar también el uso del derecho. Si tiene que resolver un problema de matemáticas en el que un chaval tiene cuatro canicas se le puede pedir que imagine cómo es ese niño, cuál es su color de pelo o cómo va vestido, pone como ejemplo.
"Nos hacemos inteligentes al ir aprendiendo, de modo que el ser capaz de resolver los problemas que nos angustian es lo que hace que esa inteligencia vaya creciendo", garantiza Alberca. "Por eso los padres tenemos la posibilidad de motivar de verdad a nuestros niños", defiende este escritor, quien expone que desarrollando cada parte del cerebro es posible estimular en los niños "la memoria, la concentración, la atención, la intuición, la imaginación, la creatividad", entre otras capacidades.

Cómo motivar a los niños

Llegados a este punto, ¿cómo motivar a los niños? Para Alberca es fundamental no confundir la motivación con el aliento. "No es decirle tú puedes. Eso es tipo de motivación usada por los norteamericanos que ya ha fracasado porque eso crea una oportunidad nueva de quedar mal y el niño tiene miedo al fracaso, poca autoestima".
Por el contrario, hay que enseñarle que "ha sido ya capaz de hacer cosas grandes" y, en concreto, es fundamental que no se hagan por él las cosas. "Hay que hacer que se abroche él el abrigo aunque tarde más que si lo hiciéramos nosotros. Hacerle que él resuelva sus pequeños problemas", enumera este profesor. "Al no protegerlo excesivamente lo hacemos capaz de resolver sus propios problemas", opina.
"Si queremos que nuestro hijo sea autónomo, capaz, que se sienta seguro ante un examen, tenemos que enseñarle cuanto antes a que sea independiente", afirma Alberca. ¿Es recomendable entonces que un padre esté con su hijo cuando hace los deberes? Este profesor cree que "si hay una persona que está con el niño haciendo las tareas debe pasar a separarse gradualmente". "Sí que puede estar al lado, pero no hace falta que, por ejemplo, le indique con el dedo los ejercicios que tiene que hacer".

El éxito de la curiosidad

Alberca sostiene que no hay niños que nazcan más o menos curiosos. Sí que "hay niños que han aprendido el éxito de la curiosidad". "Cuando un niño está muy espabilado en el fondo lo que ocurre es que ha aprendido que le da éxito, encuentra una satisfacción, parece más adulto, más mayor, le han preguntado los adultos. En definitiva, le satisface el resultado", asegura.
¿Es recomendable esas agendas que tienen hoy en día los niños plagadas de actividades extraescolares? Para Alberca "puede ser una oportunidad de estimular partes de su cerebro, lo que pasa es que siempre tiene que dominar el niño la situación y no al revés". "Todo lo que es cargar el día de aprendizaje está bien pero hasta ciertos límites, porque donde aprende más cosas el niño es en casa, en el ámbito doméstico, con los abuelos, con los padres", explica.
Por este motivo, para educar a un niño "hace falta tiempo" y "quererle mucho", tanto como para intentar que "sea independiente cuanto antes", de modo que no se le sobreproteja. De hecho, en opinión de Alberca "el problema mayor de los niños ahora mismo es la sobreprotección no la falta de tiempo de los padres".pasan con ellos dándole muchas cosas materiales o consintiéndolos, expone.
¿Desde cuándo se puede educar a un niño para que se convierta en un genio? "Cualquier edad es buena para empezar", señala Alberca, quien garantiza que se puede actuar siempre sobre un hijo y quien advierte de que "el peor padre es el que no actúa".

Cientos de Einsteins

Alberca asegura que, como profesor, "ha visto a cientos de Einsteins con unos cambios drásticos que han sabido resolver problemas porque estaban convencidos de que eran fuertes, buenos y capaces de cosas grandes". Este experto en educación es profesor de Secundaria y de la Escuela Universitaria de Magisterio Sagrado Corazón de Córdoba y además atiende un gabinete de rendimiento escolar y de relaciones familiares. Es autor de varios libros entre los que se incluyen 'Cuatro claves para que tu hijo sea feliz: abre la puerta de tu libertad interior', 'Las complicaciones del corazón: la afectividad en la adolescencia' o 'Guía para ser buenos padres'.